La aplicación
La transmisión continuamente variable (CVT) combina dinámica de conducción con eficiencia de combustible. Una unidad electrónica de control de la relación permite navegar cómodamente en modo automático, así como intervenir manualmente en la selección de la relación de transmisión. Son posibles varias estrategias de conducción, incluidas estrategias adaptativas.
El problema
En los vehículos de motorización media predominan las transmisiones por fricción con elementos metálicos y lubricación con aceite; Las transmisiones toroidales que se están desarrollando actualmente están destinadas a vehículos de gama alta con altas prestaciones. Ambos diseños basados en el contacto de acero con acero deben funcionar con bajos coeficientes de fricción y lubricación con aceite.
Las bombas crean presiones y flujos volumétricos considerables para generar fuerza aerodinámica, lubricación y refrigeración, reduciendo así la eficiencia del sistema. El esfuerzo y los costes que requiere el sistema son excesivamente elevados para los coches de la clase compacta; y las transmisiones automáticas continuamente variables apenas están disponibles en la actualidad.
La solución
Como alternativa existe la correa híbrida seca con todas las ventajas de una CVT, altas fuerzas de fricción y bajas pérdidas en los periféricos.
Las ventajas
Máximo confort de conducción sin interrupción de la tracción
Estilo de conducción deportivo con estrategia de aceleración optimizada
Ahorro de combustible y reducción de emisiones gracias a una mayor eficiencia
La estructura